El Convenio de Cajas firmado, una referencia muy negativa
Tras veintidós meses desde el vencimiento del anterior XXIII Convenio de Banca, y a menos de un mesdel fin de la segunda prórroga de su ultractividad, la negociación del nuevo convenio colectivo continúa en vía muerta, sin ningún punto de acuerdo que haga presagiar un mínimo avance en las negociaciones.
En la última reunión celebrada el pasado veintitrés de septiembre se trataron nuevamente capítulos básicos, como son la clasificación profesional, las retribuciones y el tiempo de trabajo. Capítulos en los que las posiciones de las partes parecen irreconciliables. Para CGT esta situación de bloqueo patronal resulta totalmente inaceptable toda vez que nuestras propuestas en esas materias sonrazonables y perfectamente asumibles.
En cuanto a la clasificación profesional, estamos demandando que toda persona que realice funciones comerciales, al margen de su antigüedad en la empresa y sin requisitos de temporalidad aplicables, sea al menos nivel técnico 8. Es un claro abuso patronal que miles de personas con titulaciones universitarias, con acreditaciones MIFID II y/o LCI, con carteras de clientes y con objetivos individualizados tengan niveles 9, 10, 11 e incluso 12.
Respecto a las retribuciones, la patronal pretende aprovechar la coyuntura actual y ahora apuesta interesadamente por subidas salariales ligadas al IPC, cuando ese indicador lo ha rechazado en muchas otras ocasiones al no interesarle en esos momentos, y reclama que no puede haber subida salarial si no hay pérdida de poder adquisitivo. Planteamiento este que desde CGT rechazamos de plano. No entendemos de ninguna de las maneras que las personas que trabajamos en Bancatengamos que renunciar a subidas salariales, aun cuando hipotéticamente éstas supusieran unincremento de nuestro poder adquisitivo. ¿Acaso los bancos renuncian a incrementar sus beneficios? Por tanto, ¿Por qué razón las plantillas deberíamos renunciar a mejorar nuestro salario cuando ello es más que factible?
Es más, desde CGT abogamos porque la subida salarial incorpore una parte lineal que redunde en unmayor aumento para las personas que perciben los salarios más bajos, justamente aquellas que apenas se benefician de las retribuciones variables extraconvenio que las empresas conceden demanera unilateral y arbitraria a parte de sus plantillas.
En paralelo, recientemente se ha firmado el Convenio Colectivo de cajas y entidades financieras de ahorro. En ese convenio que pudiera servirnos perfectamente de referencia, toda vez que sus firmantesCCOO, UGT y FINE también tienen mayoría en la Mesa de negociación del Convenio de Banca, han pactado unas subidas salariales miserables. Concretamente las siguientes: 2019: 0%, 2020: 0%, 2021: 0%, 2022: 0,75% y 2023: 1%. Es decir, una subida acumulada en 5 años de un mísero 1,75%.Es por ello por lo que, sin querer ser agoreros, podemos esperarnos lo peor al respecto en nuestro convenio de banca. Y nosotros nos preguntamos ¿Alguien se imagina que dirían los inversores del sector financiero si tuvieran un incremento de beneficios del 1,75% en cinco años, cuando sólo con ganar 1 euro menos que el año anterior ya es para ellos una catástrofe, a pesar de ganar miles de millones?
Además de la subida salarial, está igualmente en juego el mantenimiento del devengo de trienios de antigüedad. Retribución que históricamente pretende ser suprimida por la patronal ya que, según ella,desvirtúa los porcentajes de subida pactados. Desde CGT no vamos a tolerar ningún recorte de derechos. Ni éste, ni otros. No vemos ningún motivo razonable para ello. Hacerlo sería traicionar la confianza que las plantillas que nos han votado han depositado en nosotros.
Finalmente, sobre el capítulo de tiempo de trabajo, hemos insistido en la supresión del artículo 27.4 del convenio. Aquél que viene sistemáticamente permitiendo, con la colaboración inestimable del sindicalismo “sumiso” que lo ratifica en las empresas, la desregulación total de los horariostradicionales del sector financiero. Pretensión obviamente no compartida por la patronal, que se siente muy cómoda con su aplicación.
La próxima reunión será mañana 7 de octubre y versará, a modo de día de la marmota, sobre temas ampliamente ya tratados, tales como: movimientos de personal, beneficios sociales y prestaciones complementarias.